El máximo responsable del Consell General de Poble Democràtic, Màxim Rueda, ha propuesto hoy que se activen itinerarios formativos asociados a una ayuda económica para garantizar el acceso a educación especializada a los jóvenes sin recursos y/o formación superior, con el objetivo de acceder al mercado laboral en condiciones competitivas.
Esta medida, junto con la regularización de las prácticas no laborales y la creación de departamentos específicos en las oficinas de empleo, con orientadores que trabajen de manera individualizada con cada joven, para atender a la realidad y características de cada uno, podría revertir la peligrosa tendencia estructural que provoca que 1 de cada 4 jóvenes quede fuera del mercado laboral, y que casi el 50% tarden entre 5 y 10 años para acceder a un puesto con cierta estabilidad, según el portavoz de Poble Democràtic.
Màxim Rueda ha explicado que las instituciones públicas no están entendiendo el actual mercado laboral y siguen con propuesta alejadas de la realidad, como confirma la decisión del Ayuntamiento de Valencia de renunciar a casi 1,5 millones de euros en subvenciones para contratar a jóvenes alegando renuncias a los contratos ofertados, o falta de demandantes. Estas ayudas, que formaban parte del programa Empuju, para el que se pidieron más de 5 millones de euros a la Generalitat Valenciana, han demostrado ser un fracaso y no han conseguido revertir la tasa de paro juvenil en la ciudad.
Por ello, entendemos que hay que establecer un diálogo entre todas las administraciones competentes para dirigirse a los colectivos con mayor incidencia del desempleo, como es el caso de los jóvenes sin cualificación profesional. Y, en este sentido, el portavoz de Poble Democràtic ha incidido en activar itinerarios formativos asociados a una ayuda económica que incentive la realización y finalización de la formación y evite el abandono, al tiempo que facilite el acceso a los nuevos perfiles demandados en el mercado laboral actual.
Màxim Rueda ha criticado que en la ciudad de Valencia tengamos un 26 % de paro juvenil, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del tercer trimestre de 2018, y que esto se entienda como una gestión positiva al reducirse mínimamente frente a otros ejercicios, máxime cuando la oferta de empleo juvenil del consistorio no se ajusta a los perfiles de formación de las nuevas generaciones, con la consecuencia de que queden sin ejecutar millones de euros en ayudas.
Asimismo, el responsable de Poble Democràtic ha recordado que tampoco podemos escudarnos en que la tasa de la ciudad esté por debajo de la media española (36,3%) porque, junto con la de Grecia (43,7%), son las más altas de la Unión Europea, cuya tasa de desempleo juvenil media es del 16,8%, alcanzando el 6,6% en Alemania.
De hecho, la tasa de empleo para los jóvenes españoles de 16 a 24 años se sitúa en el 22,3% y alcanza el 38,7% para los jóvenes de 16 a 29 años, de acuerdo con la EPA, 1,6 puntos porcentuales superior a las tasas de empleo alcanzadas un año antes, según el informe Jóvenes y mercado de trabajo (junio, 2018) del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social.